En los estados del oeste votan una hora más. El resultado debería conocerse rápidamente, por el sistema de voto electrónico. Esta noche se sabrá si el próximo presidente será Jair Bolsonaro y Fernando Haddad.
Tras una jornada que transcurrió sin grandes incidentes pese a la polarización, este domingo a las 17, hora argentina, cerraron los primeros centros de votación en Brasil. En una hora más cerrarán los de los estados del oeste, y comenzará así el escrutinio de los votos en esta segunda vuelta de la elección presidencial y de gobernadores en algunos es
Tras una jornada que transcurrió sin grandes incidentes pese a la polarización, este domingo a las 17, hora argentina, cerraron los primeros centros de votación en Brasil. En una hora más cerrarán los de los estados del oeste, y comenzará así el escrutinio de los votos en esta segunda vuelta de la elección presidencial y de gobernadores en algunos estados.
Esta noche se sabrá si el próximo presidente de Brasil, a partir del 1° de enero de 2019, será el ultraderechista Jair Bolsonaro o el político de centroizquierda Fernando Haddad.
Sonrientes y optimistas, Bolsonaro y Haddad emitieron sus respectivos votos durante la mañana. «Es lo que vi en las calles a lo largo de los dos últimos meses: victoria», aseguró el capitán de la reserva del Ejército dentro del colegio electoral al que acudió acompañado por su esposa, usando un chaleco a prueba de balas y en medio de una atípica movilización de policías para reforzar su seguridad.
Bolsonaro, favorito en las encuestas, votó alrededor de las 9:30 hora argentina en la escuela municipal Rosa da Fonseca, ubicada dentro de la Villa Militar, un barrio de cuarteles y viviendas de altos oficiales. El candidato del Partido Social Liberal (PSL) apenas salió a saludar a un nutrido grupo de seguidores que lo esperaban al grito de “mito”, “fuera PT”, “presidente, presidente!”.
El desplazamiento del ex capitán del Ejército entre su residencia en la zona oeste de Río y el lejano norte de la ciudad fue vigilado muy de cerca por fuerzas policiales federales de tierra y por helicóptero, un servicio de seguridad que sólo se ofrece a ministros y jefe de Estado.
La prensa, aglomerada en la entrada del lugar de votación, corría de un lado a otro sin saber dónde posicionarse para tomar imágenes y declaraciones del postulante. “Nos está despistando” dijeron algunos. En el interior habían sido admitidos para acompañar el acto de votación apenas 30 medios entre agencias de noticias y medios brasileños. Apenas sobró espacio para el ingreso de dos emisoras de TV chilenas, lo que creó ciertos recelos en el resto de los medios internacionales que debieron conformarse con aguardar del lado de afuera.

En la primera vuelta, realizada el 7 de octubre, Bolsonaro, un ex capitán del Ejército, obtuvo el 46% de los votos y Haddad, del Partido de los Trabajadores (PT), el 29%. El tercero fue el centroizquierdista Ciro Gomes, que consiguió el 12,5% de los sufragios.
Las últimas encuestas indicaron una distancia entre Bolsonaro y su adversario Fernando Haddad amplia, aunque se fue achicando a lo largo de la última semana. Comenzó con una diferencia de 18 puntos a favor del “mito” poco después de la primera vuelta y este sábado ya había bajado a 8 puntos. Fue claro entonces que el triunfo de Bolsonaro no será “arrasador” como pensaban en su círculo íntimo.
Las primeras mesas de votación se abrieron a las 8 de la argentina y las úlltimas cerrarán a las 22. Sin embargo, y pese a que están habilitados para sufragar 147,3 millones de brasileños, los resultados se conocerán rápidamente ya que se utiliza un sistema electrónico. Se estima que alrededor de las 20, hora argentina, estén los primeros cómputos oficiales.